"Otra vez se está hablando de restringir el acceso al llamado SWIFT", constató el jefe del Ejecutivo en una reunión al advertir que "nuestra respuesta, económica o cualquier otra, será ilimitada".
El próximo jueves, 29 de enero, los cancilleres de la Unión Europea celebrarán una reunión extraordinaria del Consejo de Asuntos Exteriores convocada después de que se produjera el pasado sábado un ataque contra la ciudad de Mariúpol, en la provincia de Donetsk, que se saldó con una treintena de civiles muertos y un centenar de heridos.
Los líderes de la UE llamaron el lunes a que los titulares de Exteriores examinen las respuestas adecuadas, "en particular nuevas medidas restrictivas" contra Rusia para asegurar el cumplimiento de los acuerdos de Minsk.
Bruselas afirma que se observa un "creciente y continuo apoyo ruso a los separatistas" de Donbás, lo que, según la UE, "subraya la responsabilidad de Rusia" por el deterioro de la situación humanitaria en el este de Ucrania.
Mientras que el presidente de Letonia, Andris Berzins, no descartó en una entrevista a Bloomberg que se extendiera la lista negra de los rusos que verán congelados sus activos y tendrán prohibida la entrada en la UE.
Por otra parte, una fuente del departamento de Estado de EEUU dijo al diario ruso Kommersant que Rusia puede verse apartada del SWIFT.
No es la primera vez que se habla de excluir a Rusia de ese sistema bancario internacional, el Parlamento Europeo ya propuso estudiar la medida en septiembre pasado.