“El recorte de inversiones llevará a una disminución de suministros en la segunda mitad de 2015 lo que causará una subida de precios de petróleo”, según el reporte de la compañía, proporcionado al periódico ruso Izvestia. Después de 2018 el crudo superará 100 dólares por barril, según el pronóstico.
Moody’s califica como principal causa de la fuerte caída actual del crudo el fuerte incremento de la extracción de petróleo en EEUU, Libia e Irak, así como la disparidad del 30% entre la demanda pronosticada en 2014 y la oferta, así como el fortalecimiento del dólar frente a otras divisas.
Esta es una situación desfavorable para todos los países productores de petróleo, incluyendo EEUU, ya que tendrá que reducir sus gastos presupuestarios de este año o aumentar los impuestos.
Según Chris Lafakis, economista de Moody´s, las 25 empresas petrolíferas de esquisto más grandes de EEUU ya recortaron sus gastos para 2015 por un total de 12.000 millones de dólares, un 20% de todos los gastos previstos este año.