La viuda del líder, Suha Arafat, anunció con anterioridad su decisión de impugnar el informe médico francés sobre las circunstancias de la muerte de su esposo que excluían la posibilidad del envenenamiento. No obstante, las conclusiones de peritos franceses fueron refutadas por médicos suizos, que hallaron rastros de polonio-210 en las muestras biológicas.
"Yasir Arafat no fue envenenado con sustancias radiactivas, murió a causa de un enfermedad que padecen las personas de la tercera edad", dijo Uiba, precisando que "la causa de muerte de Arafat fue una enfermedad inflamatoria que se manifestó en estado séptico".
En diciembre de 2013 los peritos rusos comenzaron una investigación de los restos mortales de Arafat.
Por su parte, las autoridades palestinas anunciaron al obtener los resultados del peritaje que la muerte de Arafat no fue natural y prometieron encontrar a los culpables del asesinato.