"La riqueza que tienen los 70 millones de personas más ricas del planeta podría superar el año que viene a la que tienen conjuntamente los 7.000 millones restantes", denunció la organización no gubernamental en su informe, que hace público en vísperas de la reunión anual del Foro Económico de Davos.
Si no se toman medidas para detener el vertiginoso incremento de la desigualdad, advierte el informe, el 1% más rico tendrá en 2016 más del 50% de toda la riqueza del planeta, más que el 99% de la población.
Winnie Byanyima, directora ejecutiva de Intermon Oxfam, copresidirá la reunión de Davos, que se celebrará el próximo miércoles 21.
Byanyima advirtió de que "que el aumento descontrolado de la desigualdad está lastrando la lucha contra la pobreza a nivel mundial".
"A día de hoy, una de cada nueve personas carece de alimentos suficientes para comer y más de mil millones de personas aún viven con menos de 1,25 dólares al día", lamentó la organización internacional.
Más compromiso en España
Intermón ya adelantó en 2014 que España es el segundo país más desigual de Europa, sólo por detrás de Letonia.
Ante esta situación, la organización volvió a pedir un mayor compromiso a los partidos políticos, con los que comenzó una ronda de contactos para pedir medidas concretas para reducir la desigualdad de cara a las elecciones de este año.
"España es también el país en el que el sistema fiscal (con las políticas de ingresos y gastos) es menos efectivo en la reducción de la desigualdad", según el informe.
"Recientemente todos los partidos políticos de la oposición se comprometieron públicamente con la iniciativa de Oxfam intermón por unos Presupuestos Generales del Estado de la Equidad. Esperamos que este compromiso se plasme en sus programas electorales", afirmó José María Vera, director general de la organización.
El informe recoge que la fortuna ligada al sector farmacéutico, fue la que más creció entre marzo de 2013 y de 2014. Este sector, también fue el que más dinero invirtió en grupos de presión, más conocidos como lobby.
"Los sectores farmacéutico y sanitario gastaron en lobby unos 500 millones de dólares y se han convertido en uno de los que más se enriquecen puesto que la fortuna de los milmillonarios con intereses en estos campos se incrementó en un 47% en el último año", señala el informe.
En 2013, estos sectores "emplearon 550 millones de dólares en financiar ejércitos de lobistas para influir sobre las políticas que se deciden desde Washington y Bruselas", asegura Intermón.
La organización estimó que esta situación es "muy preocupante" porque el poder de los grupos de presión "puede suponer que las políticas se inclinen a favor de los intereses de unos pocos frente a las necesidades de la mayoría" y sean en la práctica "una barrera significativa, por ejemplo, al acceso a medicamentos vitales a las personas más pobres".