"Apreciamos las relaciones que construimos con Europa, nuestro principal socio comercial, durante décadas. Espero que podremos normalizarlas en breve", dijo.
A la vez, el primer ministro señaló que el mundo actual dicta la necesidad de intensificar la actividad en otros mercados.
Por ejemplo, la región Asia Pacífico, que produce el 50% del PIB mundial, ya acapara el 25% del intercambio comercial ruso.
"Rusia, como parte de la región Asia Pacífico, debe aprovechar las ventajas que ofrece ese centro de tecnologías e innovaciones", subrayó.
Al mismo tiempo recalcó que esa giro hacia Asia Pacífico no está relacionado con las sanciones occidentales contra Rusia.