Ferreira opina que "la necesidad de la creación de agencias de calificación independientes es una vieja reivindicación en América del Sur", debido a que, en muchas ocasiones, "las previsiones de las agencias vinculadas al neoliberalismo del Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial no tienen en cuenta las particularidades políticas y administrativas de estos países sino motivos políticos".
Sin embargo, como la investigadora confiesa el principal problema a la hora de crear estas agencias independientes se encuentra en "alcanzar el rigor técnico que otorgue la credibilidad necesaria en el contexto internacional", especialmente a la hora de "atraer las inversiones extranjeras que los países de Latinoamérica necesitan para su desarrollo, infraestructuras, etc.".
En cuanto al ejemplo de Brasil, cuya clasificación de riesgo fue rebajada en marzo de 2014 pasando de "BBB" a "BBB-", debido al déficit fiscal y las mediocres expectativas de crecimiento, Ferreira cree que "una agencia independiente podría tener una visión más a largo plazo que coloque a Brasil en mejores perspectivas frente a sus problemas, especialmente en el caso de algunas inversiones a largo plazo".
En este sentido, Ferreira se refirió indirectamente a las políticas de crédito seguidas por el Banco Nacional de Desarrollo de Brasil (BNDES) en obras de infraestructura como la del Puerto Mariel en Cuba, que obtuvo un crédito de más de 680 millones de dólares por parte del Gobierno de Brasil que en un futuro próximo deberían rendir excelentes resultados una vez Estados Unidos y Cuba negocien el fin del embargo económico.
Además, la economista señaló que el problema del "condicionamiento" a raíz de las previsiones de las agencias de rating "no es solo de Brasil o Latinoamérica, sino de muchos países de Europa" e indicó que "resulta importante que los países de América Latina y los BRICS deberían crear sus propias agencias con credibilidad como forma de contrarrestar el peso que las agencias norteamericanas tienen".
No obstante, la experta cree que "resultaría muy difícil crear una agencia multilateral e independiente" y que "la mejor solución sería que se creasen varias agencias con buen rigor técnico que den una mirada más amplia a las economías emergentes".
"Sólo así se eliminaría el poder que estas agencias (S&P, Moody's) tienen para decidir qué país está bien y cuál se hunde", concluyó esta especialista en Mercosur que instó a que sus países miembros "retomen el diálogo y la acción conjunta" para capear el escenario negativo que las agencias norteamericanas predicen en 2015.