Para los analistas británicos, la India crecerá en torno al 6,5% en 2015 alcanzando un PIB cercano a los 2,48 trillones de dólares y dejando atrás a Brasil con 2,12 trillones e Italia con 2,0.
Entre los motivos que impulsan el mercado indio se encuentran la expansión urbana y demográfica (1,252 millones de habitantes) además de las medidas reformistas del primer ministro, Narendra Modi, quien tras asumir el cargo en mayo de 2014 inició una agenda neoliberal que mejoró notablemente el ambiente de negocios en el país.
En este contexto, la dirección en el Banco Central indio del ex economista jefe del Fondo Monetario Internacional, Raghuram Rajan, parece haber sido determinante puesto que realizó tres subidas consecutivas de los tipos de interés consiguiendo anular el crecimiento de la inflación.
Paralelamente, la caída del precio del petróleo estaría favoreciendo ese escenario de reducción de la inflación en la India mientras que estaría perjudicando gravemente la economía de Brasil que, si bien llegó a desbancar al Reino Unido como séptima economía en 2011, podría acabar el 2015 en octava o, incluso, novena posición por detrás de Italia.