Además el año pasado fue acusado de ser cómplice en el asesinato de su exemujer, madre de dos hijos. El atacante tiene más de 50 cargos por agresión sexual y comportamiento indecente.
Anteriormente se informó de cinco rehenes —tres hombres y dos mujeres- que lograron abandonar Lindt Café.
Según el presidente de Lindt Australia, Steve Loane, en la cafetería podrían estar entre 40 y 50 personas, entre ellos unos diez empleados.
Los medios de comunicación han difundido imágenes en las que se puede ver a varios rehenes sosteniendo una bandera islámica con un escrito en árabe que dice "No hay otro Dios, sino Alá, y Mahoma es su profeta".
Las autoridades de Australia han convocado con carácter urgente una reunión del Comité de Seguridad Nacional a raíz del suceso.