El dirigente de Chechenia, Ramzán Kadírov, ha ordenado "detener y traer" a esta república norcaucásica rusa a tres diputados de Ucrania, por haber celebrado el reciente ataque terrorista que causó 14 muertos y una treintena de heridos en Grozni.
Kadírov encomendó a los cuerpos de seguridad "abrir de inmediato un expediente penal contra los diputados ucranianos Yuri Bereza, Andréi Levus e Ígor Mosiychuk que han apoyado públicamente a los terroristas", así como "tomar medidas exhaustivas para detenerlos y traerlos a Chechenia.
A través de su cuenta de Instagram, el líder checheno afirma que ya no le quedan dudas de que "nacionalistas y fascistas ucranianos proporcionan ayuda financiera y de otra índole a los terroristas que quedan en el Cáucaso".
Poco antes, Kadírov amenazó con represalias a familiares de extremistas.
"Si un combatiente en Chechenia mata a un agente policial o a otra persona, su familia será deportada inmediatamente y no podrá regresar a Chechenia, y su casa será demolida", advirtió.
Las fuerzas de seguridad chechenas eliminaron el jueves un grupo terrorista que supuestamente planeaba organizar una serie de atentados en la república. En el operativo murieron 14 agentes y 28 personas resultaron heridas. Entre las víctimas mortales hay un familiar de Ramzán Kadírov. También fueron eliminados 11 extremistas.