La Policía europea (Europol) detuvo en 45 países a 118 sospechosos de usar tarjetas de crédito fraudulentas para comprar billetes de avión.
"Está claro que en esta lucha las compañías aéreas combaten el crimen organizado", señala un comunicado del Grupo para la Prevención del Fraude en las Aerolíneas Europeas (FPWG, por sus siglas en inglés) citado por Reuters.
Según Europol, en varios casos las pruebas demuestran que las tarjetas de crédito se usaron también en otros delitos graves como el tráfico de drogas y de personas.
Los daños causados se estiman en 1.000 millones de dólares al año.
La operación duró dos días y fue dirigida desde las sedes de Europol en La Haya, Singapur y Bogotá. Se registraron 281 transacciones sospechosas.
En la operación participaron tanto agentes de policía como funcionarios de compañías aéreas y empresas que emitieron tarjetas de crédito, lo que permitió registrar rápidamente transacciones sospechosas.
Los arrestos se realizaron en 80 aeropuertos de todo el mundo e implicaron a 60 compañías aéreas.