Más de 2 millones de personas en el territorio de Irak controlado por los militantes del grupo Estado Islámico necesitan urgentemente ayuda humanitaria, afirmó el jefe de la oficina de la ONU para la coordinación de asuntos humanitarios en Ginebra, Rashid Jálikov, en una conferencia de prensa en la capital suiza después de su visita a Irak.
"Unos 2,2 millones de personas que se encuentran en el territorio iraquí controlado por los insurgentes necesitan la ayuda humanitaria. Esta ayuda ya se les presta, pero no plenamente", dijo.
Según sus palabras, la situación es peligrosa especialmente por el acercamiento de la temporada de frío, porque varias zonas de Irak carecen de infraestructura de calefacción.
Para solucionar el problema, se necesitarán unos 2.200 millones de dólares, según la oficina del alto comisionado para los derechos humanos.
Jálikov junto con el asistente del Secretario General para los asuntos humanitarios de la Organización para la Cooperación Islámica, Hesham Youssef, del 20 al 23 de octubre visitaron Irak para evaluar personalmente la gravedad de la crisis en el país.
Según los datos de la oficina de la ONU para la coordinación de asuntos humanitarios, en el territorio de Irak unos 5,2 millones de personas necesitan ayuda humanitaria por las acciones militares del Estado Islámico.
Otros 1,8 millones de personas, la mitad de ellos menores de edad, tuvieron que abandonar sus hogares. "Es poco probable que la crisis humanitaria termine en un futuro próximo".
El grupo islamista radical Estado Islámico, conocido anteriormente como Estado Islámico de Irak y el Levante, centraba sus operaciones en Siria hasta que en junio pasado atacó los territorios del norte y el oeste de Irak. Las posiciones del Estado Islámico en Irak y Siria son actualmente blanco de los bombardeos de una coalición internacional liderada por Estados Unidos.