Dos personas han sido detenidas en sendas localidades de Inglaterra bajo sospecha de actividades terroristas horas después de que el jefe de Scotland Yard, sir Bernard Hogan-Howe, desvelara en una conferencia que un mínimo de cinco británicos viajan cada semana a Irak o Siria para alistarse al Estado Islámico (EI).
Los arrestos se han llevado a cabo en diferentes operaciones y escenarios. Por la mañana, una mujer de 25 años fue conducida a una comisaría de Londres mientras operativos policiales procedieron a registrar dos inmuebles del condado vecino de Bedfordshire.
Scotland Yard confirmó por la tarde la detención de un hombre de 32 años del que sospechan que visitó un campo de entrenamiento paramilitar. "Esta investigación está relacionada con Siria", señaló el portavoz de la Policía Metropolitana de Londres.
Ambas operaciones encajan en la dinámica de los últimos meses cuando, según el jefe de la brigada antiterrorista, se han practicado un total de 218 arrestos por motivos terroristas en Reino Unido. Este dato supone un incremento del 70% en tres años.
Los expertos sostienen que más de 500 británicos se han desplazado a Siria en los últimos años y se sospecha que la gran mayoría se ha unido al grupo radical yihadista. EI continúa reclutando militantes extranjeros, del orden de cinco a la semana procedentes de Reino Unido, según Hogan-Howe.
"Estos son los que creemos que se han marchado. Puede haber muchos más que habrán viajado por otros países hasta cruzar a Siria e Irak de una forma que no siempre es posible detectar cuando hay estados fallidos y fronteras porosas", admitió en un encuentro con profesionales de la alta seguridad.
El máximo responsable de Scotland Yard explicó a los asistentes a la Cumbre de Seguridad Nacional, celebrada en Londres, que "son del tambor del terrorismo en Reino Unido" suena ahora con "más intensidad y velocidad".
Esta misma semana se confirmó la muerte en Siria de un joven de Portsmouth, el tercero de esta ciudad inglesa que cae combatiendo en el bando islamista. El Centro Internacional de Estudios Radicales, integrado en el Kings College de Londres, asegura que 25 yihadistas británicos han muerto en Oriente Medio.