El ministerio de Exteriores británico ha confirmado la liberación del profesor de inglés, David Bolam, que estaba retenido en Libia por militantes islamistas desde el pasado mayo. La nota ministerial recalca sin embargo que el Gobierno de Reino Unido "no se involucró" en la operación de rescate.
Bolam se reunificó con su familia en Inglaterra el pasado jueves, aunque su puesta en libertad se hizo pública a última hora del sábado. En el comunicado, el Foreign Office transmite su satisfacción por la conclusión "sano y a salvo de su terrible experiencia", en la que mediaron "facciones políticas locales" sin la participación del gobierno de Londres.
Los medios británicos indican que se ha pagado rescate para asegurar la vuelta a casa de Bolam. De 53 años, y natural de Craven Arms, población del condado de Shropshire, en el norte de Inglaterra, era el director de la ya cerrada Escuela Internacional de Benghazi, foco original de la revuelta contra el régimen de Gadafi.
Su captura, en mayo de 2014, fue reivindicada por Jaish a-Islam (Ejército del islam), grupo asociado al Frente Islámico cuyo centro de operaciones los expertos sitúan en Siria.
El secuestro se mantuvo en secreto hasta el pasado agosto, cuando se difundió un vídeo en que el maestro inglés pide directamente al primer ministro británico, David Cameron, que intervenga para asegurar su liberación. "Permítame regresar con mi familia", clama frente a la cámara.
En el mismo mensaje, Bolam suplica a sus familiares y amigos que se movilicen "para hacer entender al Gobierno que necesito volver a casa pronto".
El Foreign Office ha negado este fin de semana su involucración en el rescate del maestro, aunque asegura que ha "apoyado a su familia" durante todo el proceso. "El gobierno no paga, ni facilita, ni aprueba el pago de rescates. Tampoco hace concesiones al respecto", señala en la nota.
El comunicado recalca que el "pago de rescates a terroristas es ilegal". Reino Unido y Estados Unidos mantienen sendas líneas oficiales de no entablar negociaciones políticas o monetarias con secuestradores. Otros países occidentales difieren de esta estrategia y han pagado rescates en los últimos meses en apoyo de la liberación de rehenes capturados por el Estado Islámico (EI).
La liberación de Bolam, que su familia está celebrando en la intimidad, contrasta con el sentimiento colectivo de repulsa y horror por el asesinato del cooperante inglés, Alan Henning, en un vídeo difundido por EI la noche del viernes. Varios servicios religiosos se están oficiando a lo largo del domingo en la parroquia de Eccles, la población próxima a Manchester donde residencia la última víctima occidental del extremismo yihadista.
