Tras 17 años de vuelos espaciales tripulados solo por hombres, Rusia ha enviado este viernes a la órbita a su cuarta mujer cosmonauta, Elena Serova, que llegó a la Estación Espacial Internacional en compañía del compatriota Alexandr Samokutiáev y el astronauta de la NASA Barry Wilmore.
Tras 17 años de vuelos espaciales tripulados solo por hombres, Rusia ha enviado este viernes a la órbita a su cuarta mujer cosmonauta, Elena Serova, que llegó a la Estación Espacial Internacional en compañía del compatriota Alexandr Samokutiáev y el astronauta de la NASA Barry Wilmore.
De esta forma, Serova pasa a formar parte de un exclusivo “club” inaugurado en 1963 por Valentina Tereshkova, que hasta la fecha es la única mujer del mundo que ha realizado un vuelo espacial en solitario. La segunda mujer cosmonauta rusa, Svetlana Savítskaya, voló a la órbita en dos ocasiones, en 1982 y 1984, al igual que Elena Kondakova (1994 y 1997).
De esta forma, Serova pasa a formar parte de un exclusivo “club” inaugurado en 1963 por Valentina Tereshkova, que hasta la fecha es la única mujer del mundo que ha realizado un vuelo espacial en solitario. La segunda mujer cosmonauta rusa, Svetlana Savítskaya, voló a la órbita en dos ocasiones, en 1982 y 1984, al igual que Elena Kondakova (1994 y 1997).
La nave Soyuz TMA-14M con la nueva tripulación de la ISS a bordo despegó de Baikonur a la hora prevista de este viernes.
Elena prometió llamar periódicamente desde la órbita a su marido, el también cosmonauta Mark Serov, y a su hija Elena.
Antes de partir rumbo a la órbita, Serova aseguró estar muy orgullosa de su misión.
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© Foto : Roscosmos Press Service
“Seré la primera mujer rusa en pisar la ISS. Siento una gran responsabilidad ante quienes nos han formado y preparado y quiero decirles que no les vamos a fallar”, expresó.
Miembros de la expedición 41/42 a la ISS Alexandr Samokutiáev, Elena Serova y Barry Wilmore (izquierda a derecha) durante un entrenamiento en el Centro Gagarin de Preparación de Cosmonautas.
Elena Serova durante un entrenamiento en el Hidrolaboratorio, Ciudad de las Estrellas (Moscú).
Barry Wilmore, Alexandr Samokutiáev y Elena Serova tras probarse los trajes espaciales.
Según Alexandr Samokutiáev, la tripulación estaba preparada psicológicamente para el vuelo.
Elena Serova durante un entrenamiento en el Hidrolaboratorio, Ciudad de las Estrellas (Moscú).
En Baikonur, los tres cosmonautas no solo se entrenaron de cara a la misión, sino también disfrutaron de ratos de ocio.
Elena Serova en el gimnasio de Baikonur.
El conejito olímpico de peluche regalado a Elena por su hija será la mascota de la tripulación. La tradición manda que sea el comandante quien escoja la mascota pero, al tratarse de un “caso especial” por la presencia de una mujer entre los tripulantes, se decidió que fuera ella la encargada de la elección, explicó Samokutiáev.
Elena Serova optó por no cambiar de peinado antes de la misión y prometió mostrar cómo se puede lavar el pelo en cinco minutos en la órbita.
Elena Serova (centro) durante una reunión de Dmitri Medvédev y mujeres de profesiones “masculinas” en 2009.
