El presidente catalán Artur Mas ha asegurado esta noche que "silenciar la voz de un pueblo que quiere hablar es un error" y negarle el voto "al que ve en las urnas la solución, y no el problema, es un doble error".
En su mensaje institucional en la televisión autonómica con motivo de celebrarse mañana la fiesta nacional de Cataluña, el dirigente ha insistido en que "la mayoría social y el consenso político" son los pilares del proceso soberanista.
Mañana "una parte significativa del pueblo catalán volverá a demostrar al mundo cuál es la vía catalana de entender la democracia y la libertad", ha dicho.
Este jueves decenas de miles de personas formaran una V –de votar- entre las dos arterias principales de la ciudad de Barcelona al grito de "independencia". El Gobierno nacionalista tiene previsto convocar un referéndum sobre la secesión el próximo 9 de noviembre.
La Constitución española no permite este tipo de consultas. El presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, ya ha dicho esta semana que el Ejecutivo tiene previstos todos "los mecanismos" para impedirla.
En el año que se cumplen 300 años de la derrota de Cataluña frente a las tropas borbónicas en la que la región perdió sus privilegios, el presidente ha recalcado que "en momentos en que se quiere menospreciar, desvirtuar e incluso negar nuestro pasado como país, se hace más necesario que nunca conmemorar lo que hemos sido"
Tres siglos después, "la nación catalana está viva, tenemos país y nos preparamos democráticamente, cívicamente y pacíficamente para decidir nuestro futuro colectivo".
El presidente ya ha anunciado que no asistirá a la concentración de mañana por la tarde. Esta noche el Gobierno nacionalista ha hecho por primera vez una ofrenda floral en el lugar más emblemático de los separatistas, el Fossar de les Moreres de Barcelona, donde están enterrados los defensores del cerco a Barcelona en el siglo XVIII. Un rótulo recuerda hoy que "aquí no se entierra a ningún traidor".
