El espionaje de los servicios especiales de EEUU en Alemania hace que las autoridades del país europeo consideren liberarse de la dependencia política de Washington, declaró el retirado teniente de Inteligencia de Rusia, Leonid Reshétinikov.
La Administración de Alemania ordenó a sus servicios secretos limitar los contactos con organizaciones socios de EEUU hasta el mínimo indispensable a raíz del escándalo de espionaje que estalló la semana pasada con la detención del primer sospechoso de colaboración, un agente de BND. El segundo, un empleado del Ministerio alemán de Defensa, por el momento sigue en libertad.
Reshétinikov subrayó que EEUU “está convencido de que es la única y principal fuerza global y todos deben obedecerle” lo que lleva a que Inteligencia estadounidense actúe contra todos, ya sean aliados o no.
“Trabajan de ese modo no solo en Alemania sino en todos los países de la OTAN, no cabe ninguna duda”, recalcó al añadir que las relaciones entre Washington y Berlín que “dejaron de ser cordiales” hace tiempo, ahora se complicarán aún más.
El experto indicó que Alemania depende políticamente de EEUU desde 1945, año cuando acabó la II Guerra Mundial, y le será difícil modificar radicalmente sus relaciones con el aliado americano.
“Probablemente, no habrá cambios radicales. (…) Sin embargo el hecho de que hayan declarado que cesan la cooperación muestra que las autoridades alemanas se aproximan a la idea de liberarse de la dependencia de EEUU”, concluyó.
Las relaciones entre EEUU y Alemania empeoraron el año pasado después de que el extécnico de servicios secretos estadounidenses, Edward Snowden, revelara datos sobre espionaje electrónico en el territorio alemán, en particular, sobre escuchas del móvil de la canciller Angela Merkel.
En marzo pasado el Parlamento alemán votó por investigar la actividad de la Agencia Nacional de Seguridad de EEUU en su suelo.