Rusia define las elecciones presidenciales en Siria como un acontecimiento importante que garantiza el funcionamiento de las instituciones del Estado, declaró hoy el Ministerio de Exteriores ruso.
“Moscú considera los comicios celebrados como un acontecimiento importante que garantiza el ulterior funcionamiento de las instituciones del Estado en Siria, en concordancia con la Constitución”, dijo el portavoz de la cancillería rusa, Alexandr Lukashévich.
Lukashévich señaló que Moscú está decepcionada con la reacción de Occidente ante las elecciones sirias.
Siria celebró el martes elecciones presidenciales en las que fue reelegido con el 88,7% de los votos el actual mandatario, Bashar Asad, en el poder desde 2000.
Los líderes del G7 llamaron la víspera una “farsa” los comicios presidenciales en Siria y declararon que Asad no tiene futuro en el país árabe.
Lukashévich calificó de “politizada" y "decepcionante" la reacción de algunos países a las elecciones en Siria. "Es inadmisible ignorar la opinión de millones de los ciudadanos sirios que a pesar de las amenazas a su seguridad (…) se presentaron en los colegios electorales para decidir el futuro del país”, dijo el portavoz de Exteriores.
Además de Asad, a los comicios en Siria se postularon un profesor universitario, Hasan al Nuri, y un diputado, Hafez Hayar, que representan la oposición moderada.
La votación se desarrolló en las zonas bajo control del Gobierno actual de Damasco.
Siria es desde marzo de 2011 escenario de un violento conflicto armado entre las fuerzas leales a Asad y la oposición que ha causado más de 100.000 muertos, según la ONU, o más de 160.000 muertos, según la ONG Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
Asimismo, el conflicto provocó, según la ONU, unos 2,3 millones de refugiados y unos 6,5 millones de desplazados internos.
