La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) modificó su previsión de crecimiento del PIB ruso, del 2,3% al 0,5% para este año y del 2,9% al 1,8% para 2015, según un informe publicado hoy.
“Como resultado de la tensión externa y el endurecimiento de la política monetaria y crediticia, el crecimiento de la economía de Rusia se ralentizará en 2014”, indica el documento.
Según la OCDE, el año que viene la recuperación “se verá frenada por la escasa capacidad de crecimiento relacionada con el deterioro de factores económicos externos”.
El informe vincula los principales riesgos para la economía rusa a la evolución de los acontecimientos en Ucrania.
“Además, la desaceleración de la economía global puede provocar la caída del precio del petróleo y del gas”, advierten los expertos de la organización.
Al mismo tiempo, se subraya que la aceleración de las reformas estructurales en Rusia aún podría favorecer el crecimiento económico, pese al impacto negativo de la crisis ucraniana en el ambiente empresarial y los negocios con Occidente.