Una gigantesca rata de 40 centímetros sin contar la cola aterrorizó durante días a una familia sueca que tuvo que pedir ayuda al servicio de exterminadores para deshacerse del intruso, informó el diario The Local.
“Jamás hemos visto un roedor de este tamaño”, confesaron los técnicos del servicio después de cazar al animal, que se había instalado en la cocina de una vivienda de Estocolmo tras roer una pared de madera y hormigón.
Todo empezó con un extraño ruido procedente de la cocina que los inquilinos de la casa escucharon a diario durante dos semanas. “En un principio pensamos que era un ratón, pero luego nos dimos cuenta de que un ratón no podía hacer tanto ruido”, relató la madre de la familia.
El misterio se resolvió cuando la mujer, al sacar el cubo de basura de debajo del fregadero, descubrió a la rata. Atónita, no podía creer lo que veía: “Nunca creí que estos monstruos existiesen”.
Posteriormente, el ‘invasor’ se apoderó de la casa, se comió los tubos de suministro de agua del lavavajillas y comenzó a destrozar los muebles. Su ofensiva hizo ‘capitular’ al gato de la familia, que no solo no intentó dar caza al intruso, sino que se escondió en uno de los cuartos y no salió de él durante varios días.
El padre de la familia, que había estado fuera, sufrió un shock al comprobar a su regreso lo que ocurría en casa. Fue él quien llamó a los exterminadores que finalmente lograron atrapar al descomunal roedor.