El programa artístico de la ceremonia de clausura de los Juegos Olímpicos de Sochi 2014 muestra una Rusia vista por un extranjero y rinde homenaje a los grandes escritores, compositores y pintores rusos.
Comenzó con una alusión a un vitral del gran pintor Marc Chagall que cedió el paso al segundo Concierto para piano de Serguéi Rajmáninov, interpretado por Denís Matsúev en compañía de 62 pianos “danzantes”.
La actuación de fue seguida por un caleidoscopio del arte ruso: ballet, literatura, circo y otros géneros.
Según el director y guionista de la ceremonia de clausura, el suizo Daniele Finzi Pasca, el espectáculo “Rusia a través de sus reflejos” rinde homenaje a los genios rusos vistos en el “prisma de sus mejores novelas, inolvidables melodías y fantásticos lienzos” que “tuvieron una repercusión revolucionaria en el arte mundial”.