Una moneda de oro de diez rublos de 1897, con la imagen del emperador Nicolás II fue vendida por 300 mil dólares en una subasta en Nueva York.
El precio inicial de la moneda que nunca estuvo en circulación fue de 100 mil dólares.
La subasta formó parte del programa de un Congreso Internacional de Numismática de Nueva York con colecciones de monedas y condecoraciones rusas pertenecientes a coleccionistas de EEUU.
En la subasta también fue vendida una medalla de oro dedicada a los 300 años de la dinastía Románov por 270 mil dólares y una moneda de bronce de cinco kopeks de 1916, vendida por 60 mil dólares.
Según el numismático, coleccionista y uno de los organizadores de la subasta Dmítri Markov, al menos el 90 % de los objetos vendidos en las subastas de monedas de Nueva York regresan a Rusia.