La visita del presidente ruso Vladímir Putin al Vaticano y su encuentro con el papa Francisco contribuirá al desarrollo de las relaciones entre el Estado y la Iglesia, según el secretario del Departamento sinodal para las relaciones entre la Iglesia y la sociedad en el Patriarcado de Moscú, el arcipreste Dmitri Sizonenko.
La víspera, Putin fue recibido por el pontífice en una audiencia privada que duró 35 minutos. Durante el encuentro, ambos líderes conversaron sobre la situación en Oriente Próximo y otras regiones del mundo. Al término de la audiencia, Francisco pidió a Putin transmitir un saludo al patriarca de Rusia, Kiril.
“La visita de Estado del presidente ruso al Vaticano se produce en una etapa cuando las relaciones entre la Iglesia Ortodoxa de Rusia y la Santa Sede experimentan un notable desarrollo”, dijo Sizonenko.
Según el clérigo, se trata de un punto de partida para la futura colaboración entre el Estado ruso y la Iglesia en el ámbito cultural y “en aras de la conservación de los valores éticos fundamentales, la protección de la vida y el respeto al hombre y la familia”.
Se trata del primer encuentro entre Francisco y Putin, que en el pasado ya se entrevistó con dos pontífices anteriores, Juan Pablo II (en 2000 y 2003) y Benedicto XVI (en 2007).