Los ministros de Finanzas y gobernadores de bancos centrales del G-20 que se reunirán en Moscú los días 19 y 20 de julio resaltarán en su comunicado final la necesidad de coordinar y hacer más predecible la política de flexibilización cuantitativa, declaró hoy el titular de Finanzas ruso, Antón Siluánov.
“Es un asunto que preocupa a todos, especialmente a los países BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica), señaló Siluánov. Recordó que “las economías emergentes han sufrido los mayores problemas ante la noticia del posible recorte de la política de flexibilización cuantitativa”. “Ha provocado un reflujo de capitales, la debilitación de la moneda y el descenso de la producción en estos países, así que todos han resaltado incondicionalmente la necesidad de coordinar tal política y ver su carácter predecible en naciones que emiten monedas de reserva”, dijo.
Los mercados son muy sensibles ante cualquier señal de que el organismo emisor de EEUU, la Fed, podría terminar su programa de flexibilización cuantitativa, es decir, las compras de bonos para reducir las tasas de interés de largo plazo, impulsar las contrataciones, la inversión y el gasto.
Preguntado por las “guerras monetarias”, Siluánov dijo que “ya no tienen tanta actualidad”. “No creo que la competencia de divisas se discuta mucho”, indicó.