El Ministerio ruso del Interior desveló hoy la sustracción de fondos por un importe próximo a 90 millones de rublos, o unos 2,8 millones de dólares, destinados originalmente a la restauración del Teatro Bolshoi en Moscú.
Jueces instructores sospechan la empresa pública DSRR, especializada en la restauración de obras del patrimonio cultural, transfirió esta suma a una compañía contratada en 2005 para reparar instalaciones eléctricas en el Bolshoi, a pesar de que la entidad cumplió su trabajo parcialmente y con infracciones del reglamento técnico.
Ya se abrió un expediente penal por un presunto delito de fraude a gran escala, señala el comunicado del Interior sin precisar el número ni la identidad de los sospechosos.
La reforma del teatro más famoso de Rusia empezó en 2005 y costó 20.000 millones de rublos, unos 623 millones de dólares al cambio actual. El hasta hace poco primer bailarín del Bolshoi, Nikolái Tsiskaridze, calificó la restauración de “vandálica” en 2011; el entonces ministro de Cultura, Alexandr Avdéyev, afirmó que la ejecución del proyecto fue de calidad.
Este junio se supo que el Bolshoi no prolongará el contrato con Tsiskaridze. El bailarín, de 39 años, dijo que es víctima de “una persecución”.