El primer ministro de Japón, Shinzo Abe, declaró en vísperas de su visita oficial a Rusia, que confía en impulsar las negociaciones sobre el Tratado de Paz con Moscú, pendiente durante ya casi siete décadas desde que terminó la Segunda Guerra Mundial.
Abe declaró a la prensa que espera “entablar relaciones de confianza con el (presidente de Rusia) Vladímir Putin y comunicar un nuevo impulso a las estancadas negociaciones sobre el Tratado de Paz” durante su viaje a Moscú los días 28-30 de abril, la primera visita oficial de un jefe de estado del Gobierno nipón a Rusia en los últimos diez años.
Abe y Putin se reunirán el lunes, 29 de abril. Según el Kremlin, durante el encuentro los dos líderes tratarán sobre la cooperación en los ámbitos de economía, comercio, inversiones, energía, ciencia-tecnología y el humanitario. Además, hablarán de varios asuntos de la agenda internacional incluida la situación en la península de Corea.
Japón reclama las cuatro islas Kuriles del Sur (Iturup, Kunashir, Shikotan y Habomai) alegando el tratado bilateral sobre comercio y fronteras de 1855. Tras la Segunda Guerra Mundial, las cuatro islas fueron traspasadas a la Unión Soviética en virtud de acuerdos internacionales y posteriormente Rusia, como heredera legal de la URSS, asumió la soberanía de estos territorios.
Tokio condiciona la firma del Tratado de Paz con Moscú, asignatura pendiente desde 1945, a la recuperación de las cuatro islas a las que llama “Territorios del Norte”. Por su parte, Rusia se niega a revisar la soberanía de las Kuriles.