Rossiyskaya gazeta
Los militares han elaborado el Plan de Defensa de Rusia hasta 2020
El Ministerio ruso de Defensa tomó parte en la elaboración de tres documentos importantes: el Plan de Defensa de Rusia de 2016 a 2020, el Plan de Desarrollo de las Fuerzas Armadas para el mismo período y el Programa Nacional de Armamento de cara a 2025, escribe hoy el periódico gubernamental Rossiyskaya gazeta.
Así lo comunicó ayer el jefe del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas de Rusia, Valeri Guerasimov, al pronunciar un discurso en la conferencia dedicada a la seguridad de Rusia en el siglo XXI.
Es lógico que el contenido de los programas anunciados esté vinculado con amenazas hipotéticas al Estado ruso. El Estado Mayor de las Fuerzas Armadas de Rusia estudia estas amenazas atentamente y trata de pronosticar nuevos peligros de antemano.
Por ejemplo, los expertos militares coinciden en que durante los próximos 15 años se intensificará la lucha por los recursos energéticos y los mercados de venta.
Guerásimov no descarta el empleo de la fuerza militar por parte de varios países para asegurarse el acceso a estos recursos y mercados. Nadie puede garantizar que Rusia pueda quedarse al margen de conflictos armados en un futuro.
Según el jefe del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas de Rusia, el escenario de operaciones se desplaza desde la tierra y el mar hacia el aire y el espacio, así como al espacio informativo.
En esta coyuntura es imposible garantizar la seguridad nacional sin un sistema de Defensa seguro. El Ministerio ruso de Defensa planea crear nuevos departamentos que se ocuparán de la investigación y desarrollo de proyectos de defensa. En particular, se cifra grandes esperanzas en el Departamento de Innovación Tecnológica. Con la ayuda de tales unidades, se prevé renovar un 70% del arsenal de las Fuerzas Armadas de Rusia hacia 2020.
En realidad esta renovación de las Fuerzas Armadas de Rusia ya se ha iniciado. Guerásimov recordó que las armas modernas en el arsenal del Ejército pasaron de suponer el 6% en 2008 al 16% el pasado año. Para 2015 subirán al 30% y en 2017 llegarán a representar el 70%.
Todas las brigadas de misiles en el Ejército de Tierra ruso se dotarán de sistemas tácticos Iskander hacia 2020, comunicó el jefe del Estado Mayor. Guerásimov dijo también que Defensa planea crear hacia 2020 brigadas de defensa aeroespacial equipadas con misiles S-500 y S-400, así como con aparatos aéreos no tripulados de producción rusa.
La Fuerza Aérea rusa incorporará a sus arsenales grandes partidas de bombarderos tácticos Su-34, cazas Su-35, helicópteros Mi-28 y Ka-52, así como bombarderos estratégicos Tu-160 y Tu-95MS. Las Tropas de Misiles Estratégicos apuestan por los sistemas de misiles Topol-M y Yars. La Armada rusa, por su parte, recibirá nuevas fragatas y corbetas.
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Rossiyskaya gazeta, Nezavisimaya gazeta
El Parlamento ruso estudiará aumentar la tasa de alcohol permitida al volante
Los diputados del partido Rusia Justa presentaron el pasado jueves 14 de febrero un proyecto de ley que prevé aumentar la tasa de alcohol permitida para los conductores, escriben en su edición de hoy los periódicos Rossiyskaya gazeta y Nezavisimaya gazeta.
El autor de la moción, Antón Beliakov, propone derogar la ley que rebaja a cero la tasa de alcohol permitida y establecer de nuevo una normativa que no establezca "un castigo a los conductores si la proporción de alcohol en su sangre es menos de 0,2 gramos por cada litro de sangre”. Esto equivale aproximadamente a una copa de vino o a una jarra de cerveza.
El argumento principal de Beliakov es el mismo que el de todos los partidarios de establecer un mínimo de alcohol permitido: cualquiera de los 50 millones de conductores puede ser castigado injustamente a causa de un alcoholímetro defectuoso por las particularidades individuales del metabolismo.
Cabe recordar que en agosto de 2010 se ratificó una ley por la que no se tolera ningún rastro de alcohol en sangre al volante. La iniciativa fue promovida por el entonces presidente de Rusia, Dmitri Medvédev. La medida fue adoptada después de que el año anterior, cuando todavía eran legales hasta 0,3 gramos de alcohol en la sangre de los conductores, muriesen en Rusia más de 2.200 personas en el país por accidentes provocados por conductores ebrios al volante.
Ante las estadísticas relativas al consumo de alcohol en Rusia el jefe del Estado declaró públicamente que el alcoholismo había alcanzado proporciones de desastre nacional en el país y que haría lo posible para cambiar los hábitos de los rusos.
Los adversarios de la llamada “ley de la tasa cero” alegan que es prácticamente imposible que la tasa de etanol en la sangre equivalga a cero absoluto, ya que lo contienen en pequeñas dosis muchos alimentos, como pan de cebada, manzanas o queso.
“Siempre he sido y sigo siendo un partidario de la 'ley seca' al volante, pero en el caso de la tasa cero no se trata de luchar contra el alcoholismo sino de castigar a inocentes”, dijo el autor del proyecto de ley en cuestión, que al mismo tiempo prevé sanciones severas para los conductores ebrios.
El jefe adjunto del Comité de Legislación de la Duma de Estado (cámara baja del Parlamento ruso), Viacheslav Lisakov, apoyó la iniciativa de Rusia Justa pero se mostró escéptico respecto a su aprobación. Añadió que si no se aprueba sólo se podrá confiar en el sentido común de los policías de tráfico que deberían tener en cuenta el margen de error del alcoholímetro.
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RBK daily
El ingreso de Rusia en la OCDE se retrasa de nuevo
Rusia no está preparada todavía para el ingreso en la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), declaró ayer el secretario general de la organización, Ángel Gurría, en el marco de la nueva ronda de unas negociaciones que se llevan a cabo desde hace 16 años, escribe hoy el periódico RBK daily.
La 'hoja de ruta' para el ingreso de Rusia en la OCDE fue aprobada en 2007 y el gigante eurasiático va cumpliendo paulatinamente las condiciones establecidas en el documento. El presidente ruso Vladimir Putin recordó que al ingresar en la Organización Mundial de Comercio (OMC), Rusia había cumplido la condición principal para la adhesión a la OCDE.
Pero la propia organización considera que esto es insuficiente. Ángel Gurría agradeció al presidente ruso la invitación al Kremlin y también al equipo de Putin por los preparativos a la celebración de la cumbre del G-20 en San Petersburgo. Además, el secretario general de la OCDE recordó que esperaría la visita del primer vicepresidente del Gobierno, Ígor Shuválov a París.
En cuanto al ingreso en la OCDE, Rusia no está preparada para esto todavía, dijo Ángel Gurría.
Además de la adhesión a la OMC, Moscú cumplió una condición más para su ingreso en la OCDE. En febrero de 2012, Rusia se unió a la Convención Internacional contra el Soborno de los Funcionarios Extranjeros en las transacciones comerciales internacionales.
En enero pasado, el Comité de Asuntos Fiscales de la OCDE reconoció que la legislación fiscal y su respectiva aplicación corresponden a las normas internacionales. Pero al intervenir en el Foro Gaidar celebrado a finales de enero en Moscú, el jefe de la OCDE declaró que los principales obstáculos al ingreso de Rusia en esta organización son la pobreza, la insuficiente financiación del sistema de salud pública y el sistema tributario no tradicional.
Según los datos de la OCDE, la tasa de pobreza en Rusia es al menos un 7% mayor de la que se registra en los países miembros de esta organización: un 17% en comparación con un 10% de promedio. Además, se propuso a Rusia que reforme su sistema tributario, estableciendo una escala progresiva del IRPF (impuesto sobre la renta de personas físicas) que a día de hoy es del 13% para todos.
Rusia aspira a convertirse en miembro de pleno derecho de la OCDE desde hace mucho. La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico nació en 1961 como sucesora de la Organización Europea para la Cooperación Económica creada en 1948. El PIB conjunto de los 34 países miembros de la OCDE (entre los que se encuentran EEUU, Canadá, Japón, Australia y los 27 miembros de la UE) acapara más de la mitad del PIB mundial.
La organización tiene como objetivos principales realizar una política coordinada para garantizar un crecimiento económico alto y sostenible y promover la innovación. Rusia colabora con la OCDE desde 1990, año en el que se creó un centro de cooperación.
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