El emirato de Dubái, principal centro comercial y financiero de Oriente Próximo, planea convertirse en “la capital de la economía islámica”, declaró hoy el gobernador de Dubái y vicepresidente de los Emiratos Árabes Unidos (EAU), jeque Mohamed bin Rashid al Maktum.
“Dubái posee un sistema económico flexible capaz de transformarse y de abriese hacia nuevos horizontes. La infraestructura, las tecnologías y el potencial logístico del emirato le permiten (…) convertirse en la capital de la economía islámica”, dijo Al Maktum.
Agregó también que el carácter islámico de la economía no contradice los principios del mercado libre ni la política de las “puertas abiertas” que aplican los Emiratos.
Un portavoz del Departamento de Planificación de la Economía de Dubái explicó a su vez que las autoridades del emirato planean adecuar su sistema financiero y crediticio, el comercio y la producción industrial a las normas del Islam.
Dubái se impuso los últimos años como uno de los más importantes centros de la economía mundial. En 2011, el emirato facturó en comercio exterior más de 300.000 millones de dólares. En Dubái tienen su sede muchos de los más grandes bancos y compañías de seguro internacionales. Con sus numerosos nudos de transporte marítimo y aéreo, el emirato se convirtió en el más importante centro logístico de Oriente Próximo.