Irán reforzó hoy su potencial naval en el Golfo Pérsico con la incorporación de una nueva fragata lanzamisiles, dos submarinos ligeros y dos aerodeslizadores, según la prensa iraní.
La fragata lanzamisiles Sina-7 fue botada en el transcurso de una ceremonia que se desarrolló con motivo del Día de la Armada en el puerto de Bandar Abbas, en el sur de Irán.
Un alto cargo de la Armada iraní dijo en junio pasado a la agencia de noticias Fars que Irán planea construir tres o cuatro clases de fragatas lanzamisiles Sina.
Durante el evento de hoy, al que asistió el comandante de la Armada, contralmirante Habibolá Sayari, también se incorporaron a la flota dos submarinos ligeros de la clase Qadir.
Todos sus componentes, incluidos el casco, radares y avanzados sistemas de defensa, son de fabricación local, resalta Fars.
Los submarinos de la clase Qadir podrán cumplir diversas misiones navales, en particular, de reconocimiento y combate en las aguas territoriales, ante todo, en el Golfo Pérsico y el Estrecho de Ormuz que no son lo suficientemente anchos para las maniobras de grandes buques militares de superficie y sumergibles.
Dos aerodeslizadores, el británico BH7 reacondicionado por ingenieros locales y el de fabricación nacional SRNX, llamado Tondar (Rayo), también engrosaron el arsenal de la Armada iraní este miércoles.
El ministro iraní de Defensa, general de brigada Ahmad Vahidi, dijo anteriormente que Tonar puede equiparse con diversos tipos de armamento, incluidos misiles, ametralladoras y aparatos aéreos no tripulados, o drones.
Es posible usarlo para patrullaje costero, como nave de mando, en operaciones ofensivas de reconocimiento y misiones anfibias de medio alcance, para defensa asimétrica, transporte de personal y equipos o en calidad de ambulancia marítima en misiones de rescate.