La compra del 100% de la compañía ruso-británica TNK-BP permitirá a la petrolera estatal rusa Rosneft acaparar el 5% de la extracción petrolera mundial y dejar atrás a Irán, el cuatro país productor de crudo en el planeta, afirmó hoy el presidente del gigante ruso, Ígor Sechin.
La mayor petrolera rusa acaba de cerrar sendos acuerdos con la británica BP y el consorcio de multimillonarios rusos AAR para comprar el 100% de la empresa conjunta, transacción que colocará a Rosneft entre los líderes del sector petrolero mundial.
“La producción de petróleo aumentará de 2,4 millones a 4,1 millones de barriles diarios, la producción total de hidrocarburos ascenderá a 4,6 millones de barriles de los 2,6 millones actuales. La producción (de Rosneft) alcanzará el 5% de la producción mundial”, explicó el titular de la petrolera rusa.
Además, las reservas probadas de hidrocarburos PRMS que posee Rosneft aumentarán de 23.400 millones a 38.300 millones de barriles, indicó.
Según Sechin, la compra del 100% de TNK-BP también permitirá mejorar los indicadores financieros de la compañía entre un 60% y un 70%. Así, de haberse realizado esta transacción dos o tres años antes, la petrolera hubiera facturado en 2011 unos 152.000 millones de dólares.
En el ranking de las 25 mayores compañías del sector mundial de hidrocarburos que Forbes publicó en julio pasado, Rosneft se sitúa en la posición 15.
Con la compra del 50% de TNK-BP, la compañía rusa entrará en el Top-10 de la clasificación y tras pasar a contralar el 100%, se situará entre los cinco líderes y desbancará a ExxonMobil como mayor empresa pública productora de crudo.
Esta transacción será además la tercera mayor en la historia del sector de los hidrocarburos tras las de ExxonMobil y Total.