Rompehielos atómico Rossiya protagoniza la expedición polar “Ártico 2012”

La tarea principal de la expedición “Ártico 2012”, realizada entre el 8 de septiembre y el 9 de octubre pasados, consistió en desmontar la estación científica a la deriva Polo Norte 39 e instalar en un témpano de hielo su sucesora, la Polo Norte 40.

El rompehielos atómico Rossiya recorrió durante la expedición unos 10,3 mil kilómetros, de ellos más de 6,7 mil, en los hielos árticos.

Durante el recorrido, el rompehielos pasó por el Polo Norte geográfico.

Una estación polar a la deriva es toda una ciudad pequeña con casas, “calles” trazadas en la nieve e iluminación “urbana”. Frente a una base así, el rompehielos parece una enorme montaña.

No es por causalidad que los rompehielos sean de color predominantemente rojo. Deben ser lo más notables posible para otras embarcaciones. Aunque, debido al grosor de los hielos, en septiembre pasado Rossiya fue casi el único buque que navegaba en esa zona del Ártico.

La ceremonia de clausura de la estación Polo Norte 39.

Una vez desmantelada la Polo Norte 39, el rompehielos zarpó en búsqueda de un témpano para la nueva estación, asistido por un helicóptero de reconocimiento.

Los especialistas tardaron una semana en hallar un témpano de grosor y área adecuados.

La estación en témpano a la deriva Polo Norte 40 comenzó a funcionar el 1 de octubre de 2012, justamente un año después de que fuese inaugurada su predecesora, la base Polo Norte 39.

El desembarco de los tripulantes y equipos de la nueva estación y la partida del rompehielos fueron los momentos más memorables de la expedición “Ártico 2012”. Como manda la tradición, el capitán del buque se despidió tocando tres veces la sirena para desear suerte a los investigadores polares.