Al menos 11 personas murieron y 20 más resultaron heridas hoy al explotar un coche bomba en Bagdad, según las fuentes policiales.
El atentado se produjo en el sur de la capital iraquí y, según un oficial de la Policía citado por AFP, apuntaba contra un funeral chií.
Los musulmanes chiíes representan el 66% de la población iraquí, frente al 34% de los suníes, según el censo de 1997. Los suníes ocuparon cargos clave durante el gobierno de Sadam Husein pero sus posiciones se debilitaron en favor de los chiíes a raíz de la invasión de 2003. Actualmente, los chiíes desempeñan una serie de cargos importantes, entre ellos, el de primer ministro.
El pasado 23 de julio se registraron a lo ancho del territorio iraquí 27 explosiones y ataques armados que causaron más de 100 víctimas mortales y por encima de 200 heridos. Las zonas de población mayoritariamente chií fueron el principal blanco de esta ofensiva terrorista, reivindicada por Al Qaeda.