La ceremonia de despedida a los muertos en la catástrofe del Sukhoi SuperJet-100 (SSJ-100) ocurrida en Indonesia se celebró en la Ciudad Zhukovski, provincia de Moscú.
© RIA Novosti / Acceder al contenido multimediaLa ceremonia de despedida a los muertos en la catástrofe del Sukhoi SuperJet-100 (SSJ-100) ocurrida en Indonesia se celebró en la Ciudad Zhukovski, provincia de Moscú.
La ceremonia de despedida a los muertos en la catástrofe del Sukhoi SuperJet-100 (SSJ-100) ocurrida en Indonesia se celebró en la Ciudad Zhukovski, provincia de Moscú.
© RIA Novosti . Anatoli Smirnov / Acceder al contenido multimediaAlrededor del edificio en que se desarrolló la ceremonia se reunió mucha gente, incluidos los pilotos que acudieron para decir adiós a sus colegas.
Alrededor del edificio en que se desarrolló la ceremonia se reunió mucha gente, incluidos los pilotos que acudieron para decir adiós a sus colegas.
© RIA Novosti / Acceder al contenido multimediaLa gente entraba lentamente en el local llevando flores: rosas y claveles rojos.
La gente entraba lentamente en el local llevando flores: rosas y claveles rojos.
© RIA Novosti / Acceder al contenido multimediaAl término de la despedida, cuando empezaron a sacar afuera los ataúdes, un caza sobrevoló ese lugar. Los parientes de las víctimas de la catástrofe se negaron a tratar con los periodistas y les pidieron no filmar el entierro en el cementerio.
Al término de la despedida, cuando empezaron a sacar afuera los ataúdes, un caza sobrevoló ese lugar. Los parientes de las víctimas de la catástrofe se negaron a tratar con los periodistas y les pidieron no filmar el entierro en el cementerio.
© RIA Novosti . Anatoli Smirnov / Acceder al contenido multimediaEn Zhukovski, conocido como ciudad de aviadores, viven y trabajan muchos pilotos y diseñadores de aparatos aéreos. Allí se encuentran el instituto TSAGI “Zhukovski”, uno de los más importantes centros de la ciencia aeronáutica; el instituto LII “Grómov” y la oficina de la compañía Aviones Civiles Sukhoi.
En la foto: Mijaíl Pogosián, presidente de la Corporación Aeronáutica Unificadade Rusia, y el cosmonauta Alexéi Leónov (de derecha a izquierda) durante la ceremonia de despedida a los muertos en la catástrofe del Sukhoi SuperJet-100 ocurrida en Indonesia.
En la foto: Mijaíl Pogosián, presidente de la Corporación Aeronáutica Unificadade Rusia, y el cosmonauta Alexéi Leónov (de derecha a izquierda) durante la ceremonia de despedida a los muertos en la catástrofe del Sukhoi SuperJet-100 ocurrida en Indonesia.
En Zhukovski, conocido como ciudad de aviadores, viven y trabajan muchos pilotos y diseñadores de aparatos aéreos. Allí se encuentran el instituto TSAGI “Zhukovski”, uno de los más importantes centros de la ciencia aeronáutica; el instituto LII “Grómov” y la oficina de la compañía Aviones Civiles Sukhoi.
En la foto: Mijaíl Pogosián, presidente de la Corporación Aeronáutica Unificadade Rusia, y el cosmonauta Alexéi Leónov (de derecha a izquierda) durante la ceremonia de despedida a los muertos en la catástrofe del Sukhoi SuperJet-100 ocurrida en Indonesia.
En la foto: Mijaíl Pogosián, presidente de la Corporación Aeronáutica Unificadade Rusia, y el cosmonauta Alexéi Leónov (de derecha a izquierda) durante la ceremonia de despedida a los muertos en la catástrofe del Sukhoi SuperJet-100 ocurrida en Indonesia.
© RIA Novosti . Anatoli Smirnov / Acceder al contenido multimediaEl aparato Sukhoi SuperJet -100 se estrelló el 9 de mayo al colisionar con una pendiente del monte Salak en Java Occidental, Indonesia, a la altura de 1,6 kilómetros durante un vuelo de exhibición con 45 personas a bordo, incluidos ocho ciudadanos de Rusia. En el accidente no hubo supervivientes. Como resultado de una prolongada operación de rescate se pudo detectar los restos de las víctimas de la catástrofe, evacuarlos e identificarlos luego. La semana pasada, los restos mortales llegaron a Moscú a bordo de un avión del Ministerio ruso de Situaciones de Emergencia.
El aparato Sukhoi SuperJet -100 se estrelló el 9 de mayo al colisionar con una pendiente del monte Salak en Java Occidental, Indonesia, a la altura de 1,6 kilómetros durante un vuelo de exhibición con 45 personas a bordo, incluidos ocho ciudadanos de Rusia. En el accidente no hubo supervivientes. Como resultado de una prolongada operación de rescate se pudo detectar los restos de las víctimas de la catástrofe, evacuarlos e identificarlos luego. La semana pasada, los restos mortales llegaron a Moscú a bordo de un avión del Ministerio ruso de Situaciones de Emergencia.