El primer ministro de Kirguizistán, Omurbek Babanov, ordenó a los Ministerios del Interior y Justicia elaborar una ley que endurezca el castigo por la pederastia y prevea la castración en casos extremos.
“Los niños y los menores deben ser especialmente protegidos por el Estado. El futuro de nuestro país depende de la sociedad en que viven”, dijo Babanov.
El jefe del Gobierno kirguís encomendó asimismo a las fuerzas del orden público y las administraciones locales “estudiar la situación en las familias disfuncionales” y prestarles en caso de necesidad la requerida “asistencia social y de otra índole”.