El sábado pasado, residentes de numerosas ciudades rusas, desde Moscú hasta Vladivostok, en el Pacífico, se echaron a la calle, palas y rastrillos en mano, para participar en la tradicional jornada de trabajo voluntario, conocida bajo el nombre de “subbótnik” (de la voz rusa “subbota”, sábado). En Novosibirsk (Siberia Occidental), se limpió hasta la estatua de Lenin.
El sábado pasado, residentes de numerosas ciudades rusas, desde Moscú hasta Vladivostok, en el Pacífico, se echaron a la calle, palas y rastrillos en mano, para participar en la tradicional jornada de trabajo voluntario, conocida bajo el nombre de “subbótnik” (de la voz rusa “subbota”, sábado). En Novosibirsk (Siberia Occidental), se limpió hasta la estatua de Lenin.
El grueso de las actividades de cualquier “subbótnik” se reparte tradicionalmente entre encalar árboles, pintar vallas y bordillos y, por supuesto, recoger basura.
Jóvenes participan en la jornada de trabajo voluntario en el parque de una iglesia de Vladivostok.
Las calles no son los únicos espacios de una ciudad que necesitan una mano de limpieza, también se merecen mimos y cuidados las zonas naturales, como el Jardín Botánico de Novosibirsk.
Un joven lleva herramientas de jardinería durante la jornada de trabajo voluntario en el Jardín Botánico de Novosibirsk.
En la jornada participaron hasta algunos funcionarios de alto rango municipales y regionales, como el gobernador de Novosibirsk, Vasili Yúrchenko (centro).
En las calles de Moscú también se dejaron ver funcionarios de alto rango.
En la foto: el prefecto del Distrito Administrativo Central, Serguei Baidakov, participa en las labores de “subbótnik” en un parque céntrico de la capital rusa.
En la foto: el prefecto del Distrito Administrativo Central, Serguei Baidakov, participa en las labores de “subbótnik” en un parque céntrico de la capital rusa.
Tras plantar flores, el funcionario se puso a pintar vallas.
Según estimaciones de los medios informativos, alrededor de dos millones de personas asistieron a las actividades de “subbótnik” sólo en Moscú.
Para la capital rusa, se trata de la primera de varias jornadas de trabajo voluntario. El próximo sábado, periodistas, blogueros y ecologistas se encargarán de dejar limpio y arreglado el famoso Parque Gorki de Moscú.
