Moscú está en contra de imponer nuevas sanciones contra Corea del Norte, aunque considera que el Consejo de Seguridad de la ONU debería estudiar el fallido lanzamiento del cohete Unha-3 por violar la correspondiente resolución del organismo internacional, declaró este viernes el ministro de Exteriores de Rusia, Serguei Lavrov.
“Indudablemente, la violación de una resolución del Consejo de Seguridad exige que éste la estudie, aunque su respuesta debe ser ponderada. No creemos que unas sanciones nuevas aporten algo para poder resolver la situación”, afirmó Lavrov en una rueda de prensa conjunta con sus homólogos de China y la India.
Según el canciller ruso, Moscú lamenta la decisión norcoreana de lanzar el cohete pese a los reiterados llamamientos de no hacerlo por parte de la comunidad internacional.
“Afortunadamente, esta vez el fracaso de esta prueba espacial no ha resultado en daños para otros países”, señaló.
Por otro lado, el jefe de la diplomacia rusa subrayó que su país junto con China y la India abogan por una respuesta política y diplomática al lanzamiento norcoreano. Moscú confía además, en que las dos Coreas vuelvan a la mesa de negociación, agregó.
“Esperamos que los dos Estados reanuden el diálogo y las relaciones se normalicen, lo cual ayudará a que la tensión disminuya en la península de Corea y en general en el noreste de Asia”, expresó.
Al mismo tiempo, el titular de Exteriores de Rusia recordó que Pyongyang podrá realizar su programa espacial íntegramente en cuanto existan las condiciones necesarias para levantar las sanciones impuestas contra el país comunista por el Consejo de Seguridad.
El lanzamiento del cohete Unha-3 que debía ubicar en órbita el satélite de observación Kwangmyongsong-3 terminó esta madrugada en fracaso tras varias semanas de tensión internacional ante lo que se sospechaba era un ensayo balístico encubierto.
Según el Mando estadounidense de Defensa Aeroespacial (NORAD), la primera etapa del cohete cayó en el mar a 165 kilómetros de Seúl, mientras otras dos etapas no se separaron.
Por su parte, el Ministerio de Defensa de Corea del Sur informó que el accidente del Unha-3, que se partió en cuatro pedazos e impactó en aguas marinas tras recorrer tan sólo 120 kilómetros, se produjo pocos minutos después del despegue desde la base de Sohae, en el condado de Cholsan, provincia de Pyongan del Norte.
Pyongyang anunció su polémico lanzamiento a mediados de marzo, informando que tendría lugar entre el 12 y el 14 de abril y se llevaría a cabo para conmemorar el centenario del nacimiento del fundador del país comunista, Kim Il-sung.