El director del Servicio Federal ruso de Control de Drogas (FSKN), Víctor Ivanov, declaró hoy que la Organización de Cooperación de Shanghai (OCS) acaba de recibir los poderes necesarios para cooperar en la lucha contra el narcotráfico con la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
“Hemos decidido hoy que los organismos permanentes de la OCS, su Secretaría, estarán facultados para coordinar la lucha contra las drogas”, afirmó Ivanov en el transcurso de una videoconferencia Moscú-Pekín organizada en la sede de RIA Novosti.
Agregó que esta decisión “sienta una base sin precedentes para el reinicio de la relación entre la OCS y la OTAN” y que FSKN propuso dividir las labores en este ámbito.
“Los países miembros de la OCS se encargarían de interceptar las drogas y combatir el narcotráfico en sus respectivos territorios mientras que la OTAN, que mantiene en Afganistán un contingente de 150.000 militares y coordina las actividades del Ejército y la Policía afganos, se dedicaría a destruirlas (drogas) sobre el terreno”, explicó.
Semejante coordinación, a juicio del funcionario ruso, ayudará a acabar rápidamente con la producción de estupefacientes en Afganistán.
Creada en 1949, la OTAN agrupa actualmente a 28 países de Europa y América del Norte. La OCS se estableció en 2001 y tiene apenas seis miembros (China, Kazajstán, Kirguizistán, Rusia, Tayikistán y Uzbekistán) pero éstos representan un 25% de la población mundial y un 61% del territorio eurasiático.