El Maestro Mstislav Rostropóvich cumpliría 85 años este 27 de marzo. Poseedor de más de 125 premios de diversos países, miembro de seis academias de música, doctor de 38 universidades, instituyente de una fundación de ayuda a los niños enfermos, vehemente luchador por la democracia y los derechos humanos, Rostropóvich afirmó: “La conciencia es la fuerza más sorprendente. Quizás nutre ese enigmático volcán que hay en el interior de cada artista”.

Mstislav Rostropóvich nació el 27 de marzo de 1927 en Bakú en la familia de músicos profesionales. Su abuelo paterno y su madre eran pianistas, y el padre, violoncelista.

Mstislav tenía ocho años cuando el padre le enseñó a tocar el violoncelo. A los 13 años el chico interpretó con orquesta un concierto para violoncelo de Saint Saens.

A los 16 años, Mstislav ingresó en el Conservatorio de Moscú, donde aprendió del célebre violoncelista Semión Kozolúpov y del propio Dmitri Shostakóvich. En la foto: Mstislav Rostropóvich, Dmitri Shostakóvich y Sviatoslav Richter.

Entre los amigos más cercanos de Rostropóvich figuraron también otros dos descollantes compositores: Serguéi Prokófiev y Benjamín Britten (en la foto con Rostropóvich después de un concierto ofrecido en el Conservatorio de Moscú, año 1964).

Unos 60 compositores dedicaron sus obras a Rostropóvich, incluidos Aram Jachaturián, Luciano Berio, Alfred Schnitke, Leonard Bernstein, Henri Dutilleux, Krzysztof Penderecki y otros. En la foto: Mstislav Rostropóvich y Alfred Schnitke en la Gran Sala del Conservatorio de Moscú.

Rostropóvich dedicó mucho tiempo a la formación de músicos jóvenes. El Maestro inventó un sistema singular de enseñanza: casi no tocaba el violoncelo durante las clases, prefiriendo el piano. “No quiero que los discípulos copien mi manera de tocar”, decía.

Rostropóvich vio por primera vez a su futura esposa, Galina Vishnévskaya, una diva de la ópera, en un restaurante. Pasados cuatro días, la pareja contrajo el matrimonio.

A finales de la década del 60, la vida feliz de Rostropóvich y Vishnévskaya se ensombreció. Por su enérgico apoyo al escritor Alexandr Solzhenítsin, “enemigo del pueblo” (en la foto), les formalizaron primero los visados de salida de la URSS y en 1978 les quitaron la ciudadanía soviética.

Rostropóvich comentó del modo siguiente su estancia forzosa en el exterior. “Pasamos dieciséis años en Occidente. Durante todo ese tiempo nos sentimos como auténticos soldados del arte ruso”.

Precisamente por eso, al enterrarse de la intentona de agosto de 1991, Rostropóvich salió inmediatamente en vuelo de París a Moscú. En la foto: Mstislav Rostropóvich (en el centro) toma parte en un mitin en agosto de 1991.

Rostropóvich llegó a figurar entre los mejores directores de orquesta del mundo. Preparó 70 estrenos en esa calidad. En la foto: La orquesta sinfónica nacional de EEUU dirigida por Mstislav Rostropóvich da concierto en la Plaza Roja de Moscú. 25 de septiembre de 1993.

A lo largo de su vida, Rostropóvich abarcó de hecho todo el repertorio de la música de violoncelo. Fue el primero en interpretar 117 obras creadas para ese instrumento.
