El pintor y escultor español Antoni Tàpies, bautizado por la prensa como el último gran artista del siglo XX, falleció esta semana en Barcelona a los 88 años de edad.

El pintor y escultor español Antoni Tàpies, bautizado por la prensa como el último gran artista del siglo XX, falleció esta semana en Barcelona a los 88 años de edad.

Considerado uno de los artistas más representativos del abstraccionismo europeo, Tàpies cobró fama por sus cuadros y composiciones confeccionados de basura y residuos urbanos. También escribió varios libros sobre la teoría y filosofía del arte.

En 1943, por insistencia de su padre, empezó a estudiar Derecho, pero abandonó los estudios. Tàpies nunca asistió a escuelas de arte, siempre fue un "autodidacta puro". En la foto: obra de Tàpies "Creu de paper de diari" (Cruz de papel de periódico, 1946-1947).

Al inicio de su etapa artística se dedicó a la pintura de retratos y se apasionó por las obras de Vincent van Gogh y por el surrealismo. En la foto: obra de Tàpies "Parafaragamus" (1949).

Antoni Tàpies. "Zoom" (1946)

Las obras tempranas de Tàpies fueron inspiradas también por las formas abstractas de Joan Miró, a quien conoció en 1948. En la foto: obra de Tàpies "La barberia dels maleïts i dels elegits" (La barbería de los malditos y los elegidos, 1950).

En 1950 se marchó por un año a París, donde conoció a Pablo Picasso. Influenciado por la llamada "pintura matérica" de Jean Dubuffet y Jean Fautrier, desarrolló una técnica mixta del tipo collage que utilizó en sus obras. En la foto: obra de Tàpies "Porta metàllica i violí" (Puerta metálica y violín, 1956).

La formación del estilo maduro de Tàpies estuvo relacionada con un círculo internacional de pintores, entre ellos Jackson Pollock, Jean Dubuffet, Jean Fautrier y otros. En la foto: obra de Tàpies "A la memòria de Salvador Puig Antich" (1974).

A partir de los años 1970, el artista trabajó con objetos y esculturas tridimensionales y experimentó con técnicas y materiales. En la foto: obra de Tàpies "Palla i fusta" (Paja y madera, 1969).

En 1984 creó la Fundación Antoni Tàpies, actualmente un museo y al mismo tiempo un centro de investigaciones culturales. Junto con la exposición fija (en la foto), la fundación organiza muestras itinerantes, simposios, conferencias y exhibiciones de películas.

Una de las principales adquisiciones de la Fundación Antoni Tàpies en los últimos años fue la escultura "Mitjó" (Calcetín). Esta obra es conocida gracias a la polémica que se desarrolló en 1991, cuando el Museo Nacional de Arte de Cataluña se negó a instalarla. Hoy día, esta escultura de tres metros se puede verla en el patio del edificio de la fundación.
