Lograr un clima de inversión más favorable es el principal requisito para que Rusia pueda construir una economía que no dependa solo de las exportaciones de recursos naturales.
Así lo aseguraron fuentes estatales el pasado 18 de enero en el Foro Gaidar, una entidad económica rusa. Los empresarios, a su vez, explicaron qué es lo que comprenden por “clima de inversión”.
La economía debe cambiar
Los precios del petróleo no volverán a alcanzar los niveles anteriores a la crisis, cuando ascendían a 150 dólares por barril. Es un reto para la economía rusa, según la ministra rusa de Desarrollo Económico, Elvira Nabiúllina. “Responderemos con un nuevo modelo del desarrollo económico de Rusia”, dijo la titular de Desarrollo. Este modelo tendrá que basarse en el desarrollo de los sectores económicos que no están relacionados con la explotación de recursos naturales.
Sin embargo, es prematuro hablar de las innovaciones, declaró el jefe del mayor banco ruso Sberbank y ex ministro de Desarrollo Económico, Guerman Gref. “Aún no hemos alcanzado el nivel de las innovaciones y está pendiente la modernización, que es imposible sin inversiones”.
Precisamente la captación de inversiones es el principal objetivo de las autoridades rusas para los próximos años. A mediados de los años 2000 la demanda del consumidor estimulaba la afluencia del capital al país. Ahora la situación ha cambiado y la demanda no crece. Por culpa de los problemas de deuda en Europa y EEUU, no se puede confiar que estos países seán una fuente de inversión, por lo que hace falta buscar recursos propios.
Uno de ellos podría ser el dinero de los fondos de pensiones, indica Gref. Pero en Rusia este recurso no supera el 3% del PIB, mientras, por ejemplo, en la República Checa alcanza el 30% y en EEUU supera el 100%, comentó el ex ministro.
Elvira Nabiúllina cree que Rusia sólo puede contar con las inversiones privadas que asegurarían el crecimiento económico si mejora el clima empresarial en el país. Para conseguirlo, lo primero que hay que hacer es crear un sistema judicial eficaz y bajar el nivel de corrupción.
Un ambicioso plan de inversiones
De momento, no está claro qué modelo del crecimiento económico eligirá el gobierno. Es posible, que la decisión definitiva se tome tras discutir las propuestas de los expertos para el plan nacional del desarrollo ‘Estrategia-2020’.
Sin embargo, las ambiciones del Ministerio de Desarrollo Económico impresionan. En los próximos años, la afluencia de las inversiones directas desde el extranjero a Rusia deberán incrementar en una tercera parte de su volumen actual: desde 51.900 millones de dólares el año pasado hasta 70.000 o 75.000 millones de dólares, informó el director del departamento de la política de inversiones del Ministerio, Serguei Beliakov: “Dentro de diez años queremos estar entre los 30 mejores países para invertir en negocios, puede sonar como una fantasía pero si no ponemos objetivos, todo lo que hacemos perderá sentido”.
Actualmente Rusia se sitúa en el lugar 120 en la clasificación global ‘Doing Business-2012’, la ‘Facilidad de hacer negocios’, confeccionada por el Banco Mundial entre 183 economías
El objetivo planteado por el Ministerio ruso de Desarrollo Económico parece más que ambicioso. En 2011 la fuga de capitales de Rusia se duplicó superando la cifra de 84.000 millones de dólares. “Este hecho representa una evaluación que hacen los inversores extranjeros sobre la situación en el país. Lo que se llama clima de inversión”, apuntó Beliakov.
Los impuestos, la demanda y las soluciones inmediatas
Qué se entiende desde el Estado y los propios empresarios por mejorar el clima de inversión?
El director del departamento de ciencia, política industrial y negocios del gobierno de Moscú, Alexei Komissárov, explicó que según sondeos del segundo semestre de 2011, el 47% de los empresarios creen que el clima empresarial en la capital no ha cambiado en comparación con el año 2010, el 12% dijeron que ha mejorado y el 19% apuntaron su empeoramiento. “El empeoramiento del clima empresarial está relacionado, para los entrevistados, con el aumento de la carga fiscal”, señaló el responsable público.
El principal problema que impide el incremento de las inversiones en el país es el sistema fiscal ruso, confirma Boris Titov, presidente de la Asociación Rusia Empresarial. En los últimos años aumentaron considerablemente las cuotas de la seguridad social. Esto afectó, sobre todo, a la industria transformadora, donde las cuotas resultan más altas que en el sector extractor.
“Hace falta aumentar los impuestos del consumo y bajar los de la producción” insiste Titov”. Es decir, “aumentar los impuestos para los bienes inmobiliarios, objetos de lujo, recursos naturales”.
Serguei Beliakov considera indispensable facilitar todos los procedimientos burocráticos, mejorar la eficiencia operativa y anular las limitaciones en cuanto a infraestructuras. Es necesario facilitar la gestión de permisos y documentos para las obras de construcción, añade Leonid Kazinets, presidente de la corporación Barkli: “Ahora ninguna de estas gestiones se realiza de forma automática”.
Además, para atraer a los inversores hace falta solucionar el problema relacionado con la disponibilidad de los solares para obras nuevas y con la falta de los profesionales, al igual que con el atraso tecnológico.
Otro factor que podría estimular la afluencia del capital a Rusia es la demanda. “Es necesario estimular la demanda de vivienda bajando los tipos de interés”, dice Kazinets. Y también, restablecer la demanda del consumidor y la confianza en el estado, añade el presidente de el grupo británico Unilever en Rusia, Sanzhiv Kakkar.
LA OPINIÓN DEL AUTOR NO COINCIDE NECESARIAMENTE CON LA DE RIA NOVOSTI
Rusia busca cómo mejorar el clima de inversión
09:53 GMT 21.01.2012 (actualizado: 17:32 GMT 10.12.2014)
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Lograr un clima de inversión más favorable es el principal requisito para que Rusia pueda construir una economía que no dependa solo de las exportaciones de recursos naturales.