El lunes, 31 de octubre, la Conferencia General de la UNESCO resolvió admitir a Palestina como miembro de esta organización.
EEUU reaccionó de inmediato congelando su contribución económica a la UNESCO que representa más del 20% de su presupuesto. De modo que la agencia de la ONU no recibirá el próximo tramo estadounidense de 60 millones de dólares que tenía que ser ingresado en noviembre.
La cuestión clave
La mayoría de los representantes acogieron la decisión de la Conferencia General con aplausos. La resolución fue respaldada por 107 votos a favor, entre ellos, el voto de Rusia y Francia. 14 países votaron en contra, entre ellos, Suecia, República Checa, Alemania, Australia, Canadá, EEUU e Israel.
“Gracias a esta votación Palestina obtuvo parte de sus derechos y ocupó una posición adecuada en la familia de pueblos de la UNESCO”, - declaró el canciller palestino Riyad Al Maliki. Según Maliki, “este paso histórico contribuirá a conservar patrimonio cultural de todo el mundo”.
La Autoridad Nacional Palestina considera que la admisión a la UNESCO como un miembro de pleno derecho es un triunfo político, un paso más en el camino hacia la consolidación de un estado reconocido.
En realidad, no es más que una jugada propagandística. Cabe recordar que la UNESCO es una agencia de la ONU que no se dedica a la política sino a la educación, ciencia y cultura, y que el propio “estado palestino” existe, por el momento, tan sólo sobre el papel.
Está claro que siendo mienbro de la UNESCO Palestina, o, más exactamente, la Autoridad Nacional Palestina, podrá plantear problemas importantes como la conservación de los lugares sagrados de Jerusalén Este (la mezquita Al-Aqsa y la del Califa Umar), o la construcción por Israel del “muro defensivo” a lo largo de las fronteras con Palestina, condenada por una gran parte de la comunidad internacional.
Está claro que la voz de Palestina tendrá más peso que antes. Sin embargo, las resoluciones de la UNESCO, a diferencia de las del Consejo de Seguridad, son recomendatorias y no obligatorias para los países miembros de la ONU.
El estado virtual de Palestina no conseguirá solucionar en la UNESCO su problema clave: la cuestión de la pertenencia de los lugares sagrados musulmanes de Jerusalén Este, al igual que de los lugares sagrados cristianos en Belén y otros numerosos monumentos históricos y culturales situados en el territorio palestino.
Durante los ultimos 60 años Jerusalén Este (Ciudad Vieja, centro histórico de Jerusalén moderno) fue, y sigue siendo, una de las razones pricncipales de la confrontación árabe-israelí.
La parte oriental de la ciudad de Jerusalén fue ocupada y anexionada por Jordania en la guerra árabe-israelí de 1948 y permaneció bajo administración árabe hasta 1967. Ese año, tras la Guerra de los Seis Días, fue conquistada por Israel y en 1980 anexionada y declarada "completa y unida, capital de Israel".
Cabe señalar que la mayoría de los países del mundo, en particular, la URSS, no reconoció la anexión – tanta jordana como israelí – de Jerusalén Este. En julio de 1994, durante la firma del Tratado de Paz con Israel, el rey jordano Hussein renunció a pretensiones sobre el territorio de Jerusalén Este a favor del futuro estado palestino. Sin embargo, la Ciudad Vieja sigue bajo el control de los israelíes.
Ciencia ficción
El embajador de Israel ante la UNESCO, Nimrod Barkan, puso en ridículo la resolución adoptada. “Los países que pariciparon en la votación se dejaron arrastrar por la ciencia ficción, ya que adoptaropn como miembro de la UNESCO un estado que no existe”.
Según Barkan, la cuestión sobre la condición legal de Palestina no incumbe a la UNESCO, sino al Consejo de Seguridad de la ONU. “Es un intento de “atajar” el camino pero sólo sirve para mermar el prestigio de la UNESCO semprando la enemstad”.
Rusia aboga por las negociaciones
La admisión de Palestina a la UNESCO y su petición del ingreso en la ONU no son una alternativa a las negociaciones con Israel, condición obligatoria para la creación de un estado de pleno valor, declaró el viceministro de los Asuntos Exteriores de Rusia, Guennadi Gatílov, tras finalizar la votación al respecto.
Destacó que “es un momento crucial, ya que tan sólo mediante las negociaciones se podrá garantizar la creación del estado palestino soberano y viable”, que vivirá en paz con Israel.
UNESCO pierde la financiación de EEUU
Estados Unidos fue el país que reaccionó con más dureza ante la decisión de la Conferencia General de la UNESCO. La portavoz del Departamento de Estado de EEUU, Victoria Nuland, declaró que Washington suspende su cuota de financiación a la UNESCO.
“EEUU no transferirá a la UNESCO la aportación ordinaria de 60 millones de dólares correspondiente a su cuota del mes de noviembre”, dijo, aunque Estados Unidos conservarán la membrecía en esta organización.
Las consecuencias se harán sentir de inmediato, ya que la cuota estadounidense representa más del 20% del presupuesto de la UNESCO. Aliviarlas podrían las ricar monarquías petroleras del Golfo Pérsico. Los diplomáticos rusos no descartan que los países árabes, entre ellos Arabia Saudí, “estudien la posibilidad de la compensación de las cuotas estadounidenses durante dos años”. Se trata de la financiación prevista para los años 2011 y 2012.
Actualmente 131 países, o más de dos terceras partes de todos los Estados del planeta, han reconocido a Palestina. Pero no es suficiente. La formalización jurídica de la nueva condición legal del estado palestino no es viable sin la autorización del Consejo de Seguridad de la ONU. EEUU ya advirtieron que vetarían cualquier resolución con respecto al reconocimiento del mismo hasta que la Autoridad Nacional Palestina normalice sus relaciones con Israel. Sin embargo, esta condición se presenta como impracticable en un futuro próximo.
LA OPINIÓN DEL AUTOR NO COINCIDE NECESARIAMENTE CON LA DE RIA NOVOSTI
