Científicos de la Universidad de Lund, Suecia, descubrieron que la vitamina C es capaz de disolver sustancias proteínicas tóxicas que se acumulan en el cerebro afectado por el Alzheimer, dice un informe publicado en Journal of Biological Chemistry.
"Tratamos el tejido cerebral de ratones con Alzheimer con vitamina C. La proteína tóxica se disolvía", refirieron. No es obligatorio tomar la vitamina C de frutas frescas. Se puede obtenerla en grandes cantidades del ácido dehidroascórbico de un zumo que, por ejemplo, estuvo toda la noche en el frigorífico, explicaron.
En el cerebro de los enfermos de Alzheimer se forman las denominadas placas amiloides, que causan la muerte de las células nerviosas y matan en primer lugar las neuronas del centro de la memoria.
En la actualidad, no existe tratamiento para curar el mal de Alzheimer. Pero los médicos tienen en sus arsenales unos métodos para retrasar y aliviar el desarrollo de esta enfermedad. El descubrimiento de unas propiedades únicas de la vitamina C infunde esperanza de que se logre obtener un fármaco real para curar esta dolencia.