Nuevos disturbios estallaron en el norte de Londres, esta vez en el distrito de Anfield, vecino a Tottenham, que fue azotado por pogromos anteriormente, informó Scotland Yard.
Nuevos enfrentamientos entre vecinos locales y policías se produjeron la noche del pasado domingo en las calles de Anfield, después de que unos 200 jóvenes empezaron a romper cristales de tiendas y coches.
“Hay muchísima gente. No se trata de desórdenes masivos, pero es un alboroto grande”, escribió el parlamentario local Nick de Bois en su blog de Twitter.
La policía detuvo a varias personas por presunta implicación a los disturbios, asimismo envió sus patrullas antidisturbios al distrito de Anfield y a otros barrios capitalinos.
En las redes sociales abundan rumores sobre desórdenes en otros barrios de Londres, en particular en Edmonton, Dalston, Brixton y Croydon. La policía local desmintió la información sobre disturbios en Brixton y Croydon, presuntamente iniciados por la comunidad caribeña.
Ciertos medios noticiosos reportaron que un grupo de jóvenes cubiertos con caretas arrojó piedras contra coches cerca del importante centro comercial Westfield, en el oeste de Londres. No obstante, los jóvenes se dispersaron en cuanto los policías llegaran al lugar de los hechos, según comunicaron fuerzas de orden.
Actualmente, policías con perros patrullan las calles adyacentes al centro comercial, informó el corresponsal de RIA Novosti.
“Nadie quiere que se repitan escenarios que vimos la noche pasada en Tottenham”, declaró la portavoz de la policía londinense, Christine Jones.
Los enfrentamientos contra los policías comenzaron la noche de sábado a domingo en Tottenham, donde el jueves pasado Marc Duggan, de 29 años, pasajero de un taxi particular, pereció en tiroteo contra unos policías que pretendieron registrar el auto. También quedó herido un agente.
Muchedumbre de unas 300 personas se reunió la noche del pasado sábado cerca de la comisaría de Totenham reclamando justicia.
Para restablecer el orden público, las autoridades llamaron un destacamento de lucha contra conmociones masivas.
Un total de 55 participantes de disturbios permanecen detenidos. Alrededor de 30 personas resultaron heridas, de ellas 26 oficiales de policía.