El primer ministro de Noruega, Jens Stoltenberg, rehusó hoy elevar el nivel de alerta terrorista tras el doble atentado que, según los datos más recientes, causó la víspera más de 90 víctimas en las afueras de Oslo y frente a la sede del Gobierno en la capital.
“Por ahora no hay razones para elevar el nivel de alerta”, afirmó Stoltenberg en una rueda de prensa.
El primer ministro calificó de “tragedia nacional” y “pesadilla” lo ocurrido. “El país no ha visto crímenes de tal envergadura desde la Segunda Guerra Mundial”, subrayó.
Una explosión frente al complejo de edificios gubernamentales en el centro de Oslo provocó seis muertos y una veintena de heridos el pasado viernes. Poco después del primer atentado, un extremista disfrazado de policía abrió fuego en un campamento de las juventudes del Partido Laborista causando 84 víctimas.
