Al menos 15 personas murieron la noche de miércoles a jueves en combates entre las tropas gubernamentales y combatientes de la importante tribu yemenita hashid, informaron fuentes médicas, citadas por la prensa.
Los combates más fuertes se produjeron en el barrio de Al-Hassaba, donde se encuentra la residencia de Al Ahmar, jefe de la tribu hashid, que se unió a la oposición desde el pasado mes de marzo y a la que pertenece el mismo presidente Ali Abdalá Saleh.
Los enfrentamientos armados entre partidarios de Saleh y tribus opositoras en Sana, que se iniciaron el pasado 23 de mayo, ya causaron unos 200 muertos.
Mientras tanto, según reportó la agencia France Press, este jueves se produjeron enfrentamientos armados entre el Ejército y la oposición en la ciudad yemenita de Taíz. Por su parte, la agencia Reuters informó que los militares siguen disparando contra manifestantes desarmados.
Anteriormente, la alta comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Navanethem Pillay, informó que 50 personas murieron en dos días de enfrentamientos en Taíz.
Las protestas antigubernamentales en varias ciudades de Yemen continúan desde el febrero pasado. Los manifestantes exigen la renuncia de Saleh que está al frente del país desde 1978.
Las fuerzas de seguridad usan armas para dispersar a los manifestantes. Según la prensa occidental, centenares de personas resultaron muertas en disturbios.
El pasado 23 de mayo el Consejo de Cooperación del Golfo (CCG) anunció la revocación de su iniciativa para la reconciliación en Yemen después de que el presidente del país se negara a firmar el acuerdo de transición que preveía su renuncia en el plazo de un mes a cambio de inmunidad judicial.