El presidente de Rusia, Dmitri Medvédev, declaró hoy que si el Consejo de Seguridad de la ONU aprueba una operación militar terrestre contra Libia, esto significaría el comienzo de una guerra.
"Una operación militar terrestre en Libia significaría el comienzo de una guerra, pero no una guerra civil, sino una conflagración bélica con la participación de fuerzas internacionales. Por lo tanto se debe pensarlo bien antes de tomar esta decisión", dijo Medvédev.
Comentó que Rusia no quiere una escalada de violencia y está interesada en la minimización de los daños que puede sufrir la población civil de Libia.
"Moscú apoya la aspiración de la Liga Árabe, la Unión Africana y la Organización de la Conferencia Islámica a poner fin a la violencia e impedir que la población sufra", expresó el jefe del Kremlin.
Desde el 15 de febrero Libia es escenario de multitudinarias protestas contra el régimen de Muamar Gadafi que lleva más de 40 años en el poder. El país está dividido en el oeste controlado por las tropas leales a Gadafi y el este retenido por las fuerzas rebeldes.
Los ministros de Exteriores de los países de la Liga Árabe acordaron en su reunión del 12 de marzo pedir al Consejo de Seguridad de la ONU que cierre el espacio aéreo sobre Libia para que la aviación de Gadafi no bombardee las posiciones de los insurgentes.