Libia puede dejar de cooperar con Europa en la lucha contra el terrorismo y la migración ilegal, dice un mensaje del líder libio Gadafi a la cumbre extraordinaria de la UE convocada en Bruselas para analizar la situación en Libia. Su texto fue publicado hoy por la agencia noticiosa estatal libia.
Según Gadafi, Trípoli lo hará si la Unión Europea sigue presionando sobre Libia y no apoya a las autoridades libias “en la lucha contra las bandas de la red terrorista internacional Al Qaeda que aparecieron inesperadamente en varias regiones de Libia”.
“Ante Europa hay dos caminos: el de reconocer los méritos de Trípoli en la estabilización de la situación en África en su conjunto y en la lucha contra el terrorismo y la migración ilegal y el de negar esos méritos”, señaló Gadafi.
Si Europa elige el primer camino, Libia seguirá cumpliendo todos los convenios concertados con los países europeos. Y si no, Trípoli se considerará libre de todo compromiso y abandonará los convenios internacionales de lucha contra el terrorismo y la migración ilegal, indicó.
Desde mediados de febrero en Libia se desarrollan manifestaciones cuyos participantes exigen la renuncia de Muamar Gadafi, que lleva en el poder más de 40 años. Las autoridades libias reprimen con crueldad las acciones de protesta. Según organizaciones internacionales, hasta seis mil personas perecieron en los choques con las fuerzas de seguridad y los mercenarios extranjeros.
Las autoridades libias afirman que se trata de unos intentos de la red terrorista Al Qaeda de desestabilizar a Libia con el fin de crear en su territorio un Estado islámico.
El Consejo de la Unión Europea aprobó la víspera sanciones adicionales contra Libia que estipulan, en particular, congelar “los medios y recursos económicos de cinco organizaciones concretas” e incluir en la “lista negra” de la UE a una persona más: el empresario libio Mustafa Zarti, considerado testaferro de Gadafi en Austria, que ya congeló sus haberes.
La Unión Europea prohibió a fanales de febrero la entrada en sus países a 26 altos funcionarios de Libia, incluido el propio Gadafi y sus cinco familiares, así como congeló sus haberes en Europa. El Consejo de la UE aprobó así mismo la prohibición de suministrar a Libia armas, municiones y medios de represión especiales.
El Consejo de Seguridad de la ONU aprobó el 27 de febrero una resolución para Libia, que estipula, en particular, la investigación por la Corte Penal Internacional de los crímenes de lesa humanidad perpetrados por las autoridades libias.