Excavaciones realizadas en el norte de Siria permitieron restablecer la ruta de migración de los habitantes antiguos de Mesopotamia hacia el Cáucaso del Norte, informó hoy el jefe de esas obras, Raúf Muncháev, del Instituto de Arqueología de Rusia, al intervenir en una conferencia científica.
La expedición dirigida por Muncháev realizó durante años el levantamiento arqueológico en el lugar de la ciudad antigua siria de Tell Hazna (4-3 milenio a.J.C), donde descubrió unas 550 edificaciones y numerosos artefactos. Su estudio reveló la semejanza con los objetos encontrados en túmulos del Cáucaso del Norte y en las repúblicas caucasianas de Azerbaiyán y Daguestán.
Anteriormente se creía que la migración desde Mesopotamia hacia el Cáucaso se realizaba por el mar Negro. Pero los nuevos hallazgos demuestran que sus rutas pasaban por tierra firme, dijo el científico.