El corresponsal del diario británico The Guardian, Luke Harding, al que se le negó la entrada a Rusia hace una semana, ya llegó el sábado a Moscú y puede continuar su trabajo en Rusia, informó hoy el presidente de la Asociación de Corresponsales Extranjeros en Moscú, Adib Al-Sayed.
El pasado 5 de febrero, las autoridades rusas negaron a Harding, asignado a Moscú desde 2007, la entrada a Rusia y el reportero tuvo que regresar a Londres.
Según explicó la cancillería rusa, Harding "infringió las normas de trabajo para corresponsales extranjeros al haberse desplazado de Moscú a Londres sin recibir la acreditación de corresponsal extranjero a pesar de que conocía la necesidad de hacerlo".
Esta decisión de las autoridades rusas tuvo mucha repercusión en Reino Unido y también entre periodistas extranjeros acreditados en Rusia.
"Harding recibió el visado en la Embajada de Rusia en Londres y ahora puede recoger su acreditación en la cancillería rusa", comentó Al-Sayed al agregar que la Asociación está satisfecha que el problema ya está resuelto y Harding puede seguir con su trabajo en Rusia.