La estrategia de la seguridad europea y la cooperación Rusia – OTAN en esa materia, incluida la defensa antimisiles, así como la situación en Egipto son los puntos principales de la agenda de la Conferencia de Munich que se inaugura este viernes, informó el comité organizador del evento.
La conferencia se celebra en la capital de Baviera en la 47ª ocasión. La preside el ex embajador de Alemania en Gran Bretaña, Wolfgang Ischinger.
Al evento asistirán la canciller alemana Angela Merkel; la secretaria del Departamento de Estado de EEUU, Hillary Clinton; el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon; el secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen; el presidente de Afganistán, Hamid Karzai y otros altos representantes de muchos Estados y organismos internacionales.
Rusia estará representada por su canciller Serguei Lavrov. Los titulares de Exteriores de Rusia y EEUU intercambiarán en Munich las cartas de ratificación del nuevo Tratado de Reducción de Armas Estratégicas, firmadas anteriormente por los presidentes de ambos países.
Según el portavoz de la cancillería rusa Alexandr Lukashévich, Lavrov participará en la reunión ministerial del “cuarteto” de mediadores internacionales para Oriente Próximo (Rusia, EEUU, UE y ONU), la cual se convoca a iniciativa de la parte rusa.
Lavrov sostendrá negociaciones con su homólogo alemán Guido Westerwelle. Los ministros firmarán un convenio intergubernamental sobre el funcionamiento de los centros culturales de ambos países.
La Conferencia de Munich, fundada en 1962 como reunión de representantes de los departamentos de Defensa de los países de la OTAN, actualmente es un foro en que se dan cita políticos, diplomáticos, militares, empresarios, científicos y personalidades públicas de más de 40 países (miembros de la OTAN y de la Unión Europea, así como de los Estados más importantes del planeta: Rusia, China, Japón, India y otros).
La agenda de la conferencia incluye problemas actuales de la política mundial, tales como la lucha contra el terrorismo internacional, la reforma de Naciones Unidas y de la Alianza Atlántica, normalización de la situación en los puntos calientes del planeta, fortalecimiento de la seguridad regional y global.