Los terroristas suicidas suelen padecer enfermedades graves lo que les obliga a cometer actos desesperados, anunció hoy el jefe de república caucásica rusa de Ingushetia, Yunus-Bek Evkurov.
“Los recientes atentados perpetrados por suicidas, fueron realizados por gente enferma. Algunos tenían enfermedades oncológicas, otros, trastornos psicológicos”, dijo Evkurov en una rueda de prensa en Moscú.
Según el dirigente de Ingushetia, hay que llevar a cabo trabajos preventivos con está parte de la población, entre los que los terroristas buscan sus “armas de fuego”.
Evkurov añadió que a menudo los antisociales aprovechan las desgracias ajenas para reclutar a nuevos miembros.
El 24 de enero a las 16.32 hora local (13.32 GMT) en una de las salas de llegadas del aeropuerto Domodédovo de Moscú se produjo un atentado terrorista que acabó con la vida de 35 personas y causó más de un centenar de heridos.